Laura Borràs no tiene garantizada su nómina “de forma vitalicia” si cumple dos años como presidenta del Parlament

Si cumple dos años como presidenta del Parlament el próximo 12 de marzo de 2023, Borràs podrá percibir una “pensión vitalicia” del 60% de la retribución de la Presidencia, pero a partir de los 65 años. 


¿Qué se ha dicho?

Que la presidenta del Parlament, Laura Borràs, tendrá el 40% o el 50% de su nómina “garantizada de forma vitalicia” si llega a los dos años de mandato.

¿Qué sabemos?

Si cumple dos años como presidenta de la Cámara, Borràs tendrá derecho a cobrar una “pensión vitalicia” del 60% de la retribución de la Presidencia, pero a partir de los 65 años. Tras dejar el cargo, puede percibir una asignación mensual del 80% del sueldo durante cuatro años como mínimo.

El diputado de Vox en el Parlament de Catalunya Joan Garriga afirmó en una entrevista en el programa Aquí, Parlem de RTVE que la presidenta de la Cámara catalana, Laura Borràs, tendrá el 40% o el 50% de su nómina “garantizada de forma vitalicia” si llega a los dos años de mandato (en el minuto 11:30).

Es engañoso. Si cumple dos años como presidenta del Parlament el próximo 12 de marzo de 2023, Borràs podrá percibir una “pensión vitalicia” del 60% de la retribución de la Presidencia, pero a partir de los 65 años. 

Cuando deje el cargo, tendrá derecho a cobrar el 80% del sueldo que corresponda a la Presidencia del Parlament durante cuatro años y, a partir de su jubilación, también gozará de una pensión especial de expresidenta del Parlament, pero no cobrará su nómina “de forma vitalicia”, como asegura Garriga. 

Borràs tendrá en marzo del año que viene 52 años, por lo que en caso de dejar el cargo entonces, pasaría al menos nueve años sin cobrar esta retribución.

“Laura Borràs, si aguanta hasta marzo, tendrá el 50% de su nómina, o el 40%, garantizada de forma vitalicia”

Joan Garriga, Vox

Haber ostentado el cargo “dos años como mínimo”

La Ley 2/1988, de 26 de febrero, sobre asignaciones temporales y pensiones a los Presidentes del Parlamento, al cesar en su cargo, y a sus familiares regula en su artículo 2 que, para tener “derecho a percibir una pensión vitalicia”, los expresidentes del Parlamento tienen que haber “ostentado el cargo durante dos años como mínimo”.

Laura Borràs llegó a la Presidencia de la Cámara el 12 de marzo de 2021 tras ser elegida con los votos a favor de Junts y ERC en la sesión constitutiva del Parlament. Su nombramiento se publicó cuatro días más tarde en el Boletín Oficial del Parlament. Así pues, si Borràs llega a marzo de 2023 siendo presidenta de la Cámara catalana, tendrá derecho a recibir la pensión vitalicia, pero si se marcha antes, no cumpliría este requisito.

El 60% de la retribución mensual

Esta pensión vitalicia prevista en la Ley 2/1988 era inicialmente “igual al 40% de la retribución mensual correspondiente al ejercicio del cargo de presidente del Parlament”. Esta es la cifra que menciona Garriga en la entrevista.

Sin embargo, desde 2003, el porcentaje es del 60%, ya que la Ley 6/2003, de 22 de abril, del estatuto de los expresidentes de la Generalitat incluyó una disposición adicional segunda para equiparar la pensión de los expresidentes del Parlament a la de los expresidentes de la Generalitat, de recién creación.

En resumidas cuentas, los expresidentes del Parlament que lo hayan sido como mínimo dos años tienen derecho a una pensión vitalicia a partir de los 65 años equivalente al 60% del sueldo de quien ostente la Presidencia de la Cámara en el momento de recibir la prestación.

Una asignación mensual del 80% del sueldo durante cuatro años como mínimo 

Además de la pensión vitalicia, el artículo 1 de la Ley 2/1988 también contempla “una asignación mensual equivalente al 80% de la retribución mensual que corresponde al ejercicio del cargo de presidente del Parlament”.

Del mismo modo que en el caso anterior, en 2003 también hubo cambios. Originariamente, los expresidentes del Parlament tenían derecho a percibir esta asignación “durante el mismo tiempo que habrán estado en el cargo y como máximo durante 24 mensualidades”. Ahora bien, desde 2003, el período temporal es “equivalente a la mitad del tiempo que han estado en el cargo y, como mínimo, por una legislatura” (así consta en la disposición adicional primera).

“Una legislatura” equivale a cuatro años independientemente de lo que dure el mandato. Artur Mas, por ejemplo, ha cobrado la asignación durante dos legislaturas (entre el 12 de enero de 2016 y el 11 de enero de 2020), como consta en las cifras disponibles en la web del Govern Obert.

Ambas retribuciones son incompatibles con cobrar un sueldo de parlamentario, miembro del Gobierno o alto cargo, tanto de la Administración del Estado como de la Generalitat, y con el ejercicio de cualquier otro cargo público o de libre designación remunerado.

Laura Borràs tiene actualmente 51 años (nació el 5 de octubre de 1970). Por lo tanto, en marzo del año que viene tendrá 52 años. Si deja el cargo tras llegar a los dos años de mandato, pasaría nueve, como mínimo, sin retribución

Si llega hasta el final de la legislatura y no repite como presidenta del Parlament, dejaría el cargo en 2025, con 54, y tendría derecho a cobrar la asignación mensual del 80% hasta 2029, con 59 años. En 2035, cumpliría los 65 años y podría acceder a la pensión vitalicia del 60%.

Hemos preguntado al grupo parlamentario de Vox sobre las declaraciones de Joan Garriga, pero en el momento de publicar este artículo no habíamos obtenido respuesta.

Sin información sobre quién la cobra

Los derechos económicos que tienen los expresidentes del Parlament son parecidos a los previstos para los presidentes de la Generalitat. Sin embargo, hay una diferencia clave. La Generalitat de Catalunya publica datos en abierto sobre las retribuciones que perciben los expresidentes de la Generalitat. Es lo que se conoce como “publicidad activa”. Sin embargo, no hemos encontrado las retribuciones que reciben o han recibido los expresidentes de la Cámara catalana. 

Aunque la cuantía es pública porque corresponde a una proporción del sueldo vigente del cargo en cuestión, la información sobre si algún expresidente ha renunciado a ella no está disponible en el caso de la Presidencia del Parlament.

El departamento de prensa del Parlament ha respondido a Verificat que no dispone de esta información y la hemos solicitado a través de una petición de transparencia y una petición a la Secretaria de Gobierno Abierto de la Generalitat. A la hora de publicar esta verificación, no habíamos obtenido respuesta. 

Los presupuestos de la Generalitat para 2022 incluían una partida de 950.000 euros relativa a la asignación temporal y las pensiones tanto de los expresidentes de Generalitat como del Parlament.

Debido a esta falta de información, tampoco conocemos con certeza quién está cobrando actualmente la pensión vitalicia. Los únicos tres expresidentes del Parlament vivos con más de 65 años son Joan Rigol, Núria de Gispert y Carme Forcadell. La ley también prevé en su artículo 4 que el cónyuge viudo de un expresidente de la Cámara con derecho a pensión vitalicia perciba el 50% de la pensión de jubilación.