Las vacunas de ARN mensajero no modifican el ADN ni amenazan el genoma humano

No hay ninguna evidencia científica que indique que el ARN mensajero usado en las vacunas pueda tener la capacidad de alterar nuestro genoma


Nos habéis hecho llegar un mensaje de audio publicado originariamente en Facebook por Rafael Paradas Moreno (pseudónimo de Ricardo Delgado Martín, conocido por sus argumentos contrarios a las mascarillas) y que se está compartiendo por WhatsApp. Se trata de un mensaje de 37 minutos en el cual Delgado se refiere a la pandemia y a las vacunas contra el Covid-19 con algunos de los argumentos usados habitualmente para negar la pandemia del coronavirus: el 5G como causa de la pandemia, la existencia de un plan para exterminar la humanidad… 

Entre otras afirmaciones FALSAS que ya hemos verificado, el mensaje siembra dudas sobre las vacunas de ARN mensajero, como las que se están empezando a comercializar para hacer frente al SARS-CoV-2. En concreto, Delgado afirma que el ARN mensajero “participa en la síntesis de proteínas para alterar su genoma”. No es un argumento nuevo, frecuentemente, encontramos mensajes en las redes que afirman que la vacuna contra el Covid-19 modifica el ADN y que, por lo tanto, constituye una amenaza para el genoma humano y esto también es FALSO.

Tanto la vacuna de Pfizer-BioNTech como la de Moderna pertenecen a las llamadas vacunas de ARN mensajero. A diferencia de las tradicionales, estas no introducen ningún patógeno para provocar la respuesta inmunitaria del organismo sino que incorpora un ARN mensajero sintético creado en un laboratorio que contiene parte del código genético del virus. El ARN mensajero se introduce en las células del organismo para permitir que fabrique la proteína viral y una vez se presente en la membrana celular estimule el sistema inmune.

Ante las dudas generadas en la población por esta nueva tecnología, los Centros por el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de los Estados Unidos han elaborado una guía para explicar el funcionamiento. El Instituto de Salud Global de Barcelona (IsGlobal) también ha elaborado un video para hacer pedagogía sobre esta nueva generación de vacunas y, en general, sobre el proceso de vacunación contra la pandemia. Una de las cuestiones que aborda es precisamente el funcionamiento de las vacunas de ARN mensajero contra el Covid-19: “Lo que hacen las vacunas de ARN mensajero es introducir en nuestras células una secuencia génica que codifica para una proteína de virus SARS-CoV-2, la proteína S. Podemos decir que usa la maquinaria de nuestras células para fabricar copias de esta proteína. A continuación, nuestro sistema inmunitario reconoce la proteína S como extraña y responde generando anticuerpos específicos. Por lo tanto, cuando el coronavirus entre en nuestro organismo, ya tendremos inmunidad y no nos pondremos enfermos”.

En un artículo publicado en The Conversation Jose María Jimenez Guardeño, investigador del Departamento de Enfermedades Infecciosas del King’s College de London, y Ana María Ortega-Prieto, postdoctoral research associate también del King's College London, desmienten completamente que el ARN pueda alterar nuestro ADN y, por lo tanto, dañar el genoma

Los autores, afirman que “la molécula de ARN es muy frágil -tanto, que estas vacunas se tienen que conservar a temperaturas bajísimas- y el tiempo que permanece en las células es muy corto (horas) (…) Por lo tanto, este ARN no se quedará dentro de la célula un tiempo suficiente como para poder hacer algo más que producir la proteína de virus y desaparecer”.

Y, por lo tanto, sobre si modifican el ADN y amenazan el genoma humano, se expresan en estos términos: “en resumen, no hay ninguna evidencia científica en base a lo que conocemos sobre biología molecular que indique que el ARN mensajero usado en las vacunas frente al Covid-19 pueda tener la capacidad de alterar nuestro genoma”. 

La nueva variante del virus aparecida en el Reino Unido

En el mensaje de audio que nos habéis hecho llegar, Delgado también se refiere a la nueva variante del virus aparecida en el Reino Unido para desmentir la existencia y asegurar que "las muertes y los nuevos enfermos en el Reino Unido, realmente se corresponden a la administración de esto que han denominado vacuna". El 21 de diciembre la OMS informó que las autoridades británicas  habían avisado de la identificación de una nueva variante del Covid-19 conocida como SARS-CoV-2 VUI 202012/0. Aquel mismo día, Salud Pública de Inglaterra (PHE por sus siglas en inglés) había publicado una investigación sobre la nueva variante.

Delgado pone como ejemplo de la inconsistencia de este anuncio el hecho que, según dice, la existencia de la nueva variante se habría identificado mediante PCR y esto no es cierto porque la técnica utilizada es la secuenciación genómica viral. 

Encontramos una nueva evidencia en el informe sobre la variante británica del virus publicado el 29 de diciembre de 2020 por el Centro Europeo por la Prevención y Control de Enfermedades (ECDC): “El Reino Unido (Reino Unido) se ha enfrentado a un rápido aumento de las tasas de casos COVID-19 en el sudeste, en el este y en el área de Londres, que se asocia con la aparición de una nueva variante SARS-CoV-2, VOC 202012/01. El 26 de diciembre de 2020, se han registrado más de 3.000 casos de esta nueva variante, confirmada por la secuenciación del genoma, según el Reino Unido.