Tutorial para crear desinformación y esparcirla online (no lo intentéis en casa)

Todo lo que necesitas es una idea, presupuesto y paciencia.

captura de pantalla del tiktok de george mason

He pagado una web de noticias para que publique una noticia falsa, y es preocupante lo barato y fácil que ha sido”. Así comienza el TikTok publicado por @georgemasontv, un creador de contenido con más de 170 K seguidores en esta red social.

El tiktoker ha demostrado lo fácil que resulta crear desinformación y difundirla en línea. Todo lo necesario es una idea, un presupuesto (relativamente asequible) y esperar. De hecho, en su caso, apenas invirtió ni tiempo, ya que el artículo lo redactó mayoritariamente el ChatGPT.

Quien paga manda

Mason explica en el vídeo que, a través de la web de Fiverr, un mercado online de servicios autónomos, buscó webs donde publicar un artículo. La noticia que esparció decía que Pedro Pascal participaría en la película de Minecraft, donde supuestamente interpretaba al personaje de Steve.

Pero el artículo era falso: el actor no hará de Steve en la película mencionada, y de hecho, ni siquiera está entre la plantilla. “¡Me lo he inventado!”, proclamaba el creador del rumor, especificando que la mayor parte del artículo había sido escrita por el ChatGPT. Por si fuera poco, Mason explica que se incluyó a sí mismo como supuesto director de la película “Sonic The Hedgehog”, lanzada en 2020. “Y, por si no lo sabíais, no he dirigido esta película”, añadía en tono irónico.

¿Te habías preguntado alguna vez cuál es el precio de la desinformación? Pues el creador de contenido dice que, por un precio de unos 130 $ (unos 122 €), pudo publicar en la web New York Weekly —una agencia de noticias y comunicación— este artículo elaborado casi completamente por el ChatGPT, que difundía información falsa y que citaba al propio Mason como director de una película.

Para terminar de rematarlo, algunas webs (1,2) empezaron a difundirlo con noticias sobre la supuesta aparición de Pedro Pascal en Minecraft. Incluso IMDB, la base de datos online más popular sobre actores, películas, programas de televisión y videojuegos, incluyó la supuesta participación del actor. Según indica la propia web, la mayor parte de la información disponible la envían personas que la visitan, es decir, que cualquiera puede actualizar los datos disponibles. Verificat se ha puesto en contacto con la plataforma preguntando si existe algún proceso de revisión, pero a la hora de publicar este artículo, todavía no había recibido respuesta.

El rumor llegó a unos niveles de difusión tan grandes que, actualmente, una búsqueda en Google de “Minecraft película” muestra las imágenes de los actores de la película, ¿adivináis quién es uno de ellos? Efectivamente: Pedro Pascal!!! Actualmente este dato ya está corregido en la web de IMDB, pero en el momento de publicar este artículo, sigue apareciendo en Google.

Más allá de Pedro Pascal

No es la primera vez que ocurre algo de este estilo. El mismo tiktoker que difundió la noticia sobre Pedro Pascal, también esparció un rumor que aseguraba que el actor Timothée Chalamet había sido detenido por orinar sobre un coche de policía. ¿Cómo lo hizo? Editó una foto en blanco y negro del actor para simular una fotografía policial, y con ella falsificó un documento de detención con los datos de Chalamet. El rumor, difundido a través de X (antes Twitter) se hizo viral en poco tiempo, alcanzando 4 millones de visualizaciones. La broma le costó, según indica en el TikTok, un mensaje del supuesto mánager del actor pidiendo que retirara el vídeo.

Internet va lleno de casos del estilo. Otro ejemplo lo encontramos en el restaurante inexistente de Londres que se convirtió en número 1 en TripAdvisor gracias a comentarios positivos que dejaron a personas cercanas al creador del rumor (1,2,3,4,5). Y podemos encontrar también casos en el otro extremo: Gunter Wallraff era un periodista de investigación alemán que se transformaba, creando una identidad ficticia para infiltrarse en un grupo y vivir experiencias que posteriormente relataría y que de otra forma hubieran sido difíciles de investigar.

La responsabilidad de los medios

Multitud de webs han publicado la noticia, lo que añade un extra de complejidad: si lo dicen muchas fuentes, es normal que tendamos a pensar que es cierto. Pero algunas webs son una representación esmerada de la actitud que adoptamos los humanos ante una noticia de este estilo: nadie quiere ser el último en enterarse de la información, lo que hace que a veces compartamos las cosas sin comprobarlas.

Por Internet podemos encontrar gran cantidad de contenido de baja calidad, que a menudo está disfrazado de noticias o periodismo. Por eso es muy importante que tengamos en cuenta que, aunque una página nos parezca confiable —como puede ocurrir con IMBD—, también puede fallar y publicar cosas erróneas, y por eso debemos saber ante qué tipo de fuente estamos: un medio real, una web con contenidos generados por los usuarios, o, por ejemplo, una web de contenidos de baja calidad construida para conseguir clics, como la que publicó la noticia de Pedro Pascal. Sin embargo, si no estamos ante una fuente en la que confiemos, debemos ir a buscar el origen de la supuesta información.

Y si al final de búsqueda todavía no conocemos la página de dónde ha salido la información original, podemos realizar una breve investigación para analizar la veracidad de esta fuente. La confiabilidad de una fuente dependerá de factores como la experiencia, historial y reputación, pero también del tema, el contexto y las motivaciones que pueda tener para hablar de ello. De esto hablamos en la cápsula 2 de nuestro programa Desfake (disponible de forma gratuita aquí).

Los medios de comunicación, las redes sociales, las organizaciones políticas, etc. compiten por nuestro tiempo haciéndonos llegar contenidos que nos interesan. Esto es lo que llamamos «economía de la atención» porque la atención se utiliza como un bien escaso susceptible de ser cuantificado. Todo el mundo se suma a la competencia por la atención, incluso el profesorado, que busca captar la atención del alumnado. Cada segundo de nuestra atención en Internet es una oportunidad de oro para vendernos un producto. Puedes encontrar más información en la cápsula 1 de nuestro programa Desfake (disponible de forma gratuita aquí)

Pero que quieran llamar nuestra atención no exculpa a los medios de su responsabilidad como fuentes de información: es necesario que comprueben lo que publican para convertirse en fuentes confiables que podamos consultar en caso de tener dudas sobre la veracidad de unos hechos.