Profecías de un cómic manga o vídeos fuera de contexto: las desinformaciones del terremoto de Rusia

El epicentro se ha situado en el mar con una magnitud de 8,8, de los más fuertes registrados en el mundo desde 1900

El epicentro se ha situado en el mar con una magnitud de 8,8, de los más fuertes registrados en el mundo desde 1900

Una dona al Japó. Font: AFP
,

Decenas de desinformaciones se han hecho virales este miércoles después de que un terremoto de magnitud 8,8 afectara el sur de la península de Kamchatka, en el extremo este de Rusia, en la costa del océano Pacífico. El epicentro ha sido en mar abierto, según informa el Servicio Geológico de los Estados Unidos (USGS). Esto ha provocado avisos inmediatos por posible tsunami en otros países del Pacífico, situados en el llamado “cinturón de fuego del Pacífico”, el área del planeta que concentra cerca del 90% de los terremotos del mundo.

El terremoto de Kamchatka está entre los 10 más fuertes registrados en el mundo desde 1900 y es el más grande de la última década, según el registro de grandes terremotos del USGS. El de mayor magnitud de la historia reciente es uno registrado en 1960 en Valdivia (Chile) con una magnitud de 9,5. Repasamos algunos de los mensajes falsos y engañosos que han circulado más.

Vinculan el tsunami con la “profecía” de un cómic manga

Después del terremoto de este miércoles, usuarios en redes sociales se han hecho eco de un cómic manga que había augurado que, el 5 de julio de este año, tendrían lugar un gran terremoto y un tsunami. Para los internautas que lo comparten, el movimiento de hoy responde a la predicción de esta publicación. Sin embargo, es FALSO que se puedan predecir los terremotos: no existe ninguna técnica científica desarrollada capaz de predecirlos.

Se trata del cómic “El futuro que vi”, una novela gráfica japonesa basada en supuestos sueños “proféticos” del autor, Ryo Tatsuki, según explicaron varios medios internacionales como The Guardian y el medio alemán Deutsche Welle semanas antes del terremoto de Rusia. El autor publicó una primera versión del cómic manga en 1999 previendo un catastrófico terremoto y posterior tsunami en el país nipón en marzo de 2011, como acabó sucediendo. En una nueva edición del cómic en 2021, Tatsuki incluyó la previsión de un gran terremoto el 5 de julio de 2025 entre Japón y Filipinas que debía provocar un tsunami tres veces mayor al observado en 2011. Esta profecía ha coincidido este año con una bajada de reservas turísticas en el país nipón, sobre todo de otros países asiáticos.

Sin embargo, tal evento no sucedió el 5 de julio, el terremoto se ha producido al este de Rusia y las olas que han llegado a Japón han sido menores que las de 2011.

El punto relevante es que la ciencia aún no es capaz de predecir cuándo sucederá un terremoto, tal como afirma Germán Varas, académico del Instituto de Física de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (Chile), en una entrevista hecha por la universidad. Para el experto de Chile (uno de los países más sísmicos del planeta), existen métodos que buscan predecir terremotos, como son los satélites que miden el desplazamiento de la superficie terrestre para hacer estimaciones de la energía acumulada en una zona. Sin embargo, según Varas, estos datos son estimaciones generales porque puede ser que un movimiento estalle en cualquier momento y en cualquier punto de la placa tectónica, que tiene miles de kilómetros.

Con todo, Japón es una sociedad que tiene muy presentes catástrofes como los grandes terremotos y los tsunamis por la frecuencia de estos hechos a lo largo de su historia, tal como afirma Florentino Rodao, catedrático de la Universidad Complutense de Madrid especializado en Historia de Asia, entrevistado en RNE el 16 de julio. Rodao explica que los desastres y las distopías son “muy famosas y muy populares” en la literatura japonesa.

Una tienda durante un terremoto en Myanmar, sacada de contexto

Justo después de que pasara el terremoto en Kamchatka, las redes se han llenado de vídeos virales mostrando supuestas escenas grabadas durante el movimiento sísmico. En uno de ellos, se ve a una trabajadora en el mostrador de una tienda de artículos de telefonía y, cuando empieza el terremoto, los armarios y objetos de alrededor caen de manera violenta. Es FALSO.

El vídeo no corresponde al terremoto de Kamchatka, sino al terremoto de magnitud 7,7 que sacudió Myanmar el 28 de marzo de este año, según se puede comprobar haciendo una búsqueda inversa de imágenes en Google. La verificadora india Newschecker, miembro como Verificat de las redes internacionales de verificación, también ha comprobado la autenticidad del vídeo.

Vuelve a circular el tsunami de un pequeño pueblo de Groenlandia

Otro vídeo viral con cientos de miles de visualizaciones se utiliza para ilustrar los supuestos efectos del terremoto mostrando la entrada de un tsunami en una cala en un paisaje gélido donde hay varias personas junto a unas pequeñas embarcaciones. También es FALSO.

Es un vídeo real sacado de contexto de un tsunami que ocurrió en Groenlandia el 17 de junio de 2017. Es un tsunami que fue provocado por un deslizamiento de millones de metros cúbicos de roca que cayeron al agua, según recoge el Centro Internacional de Información sobre Tsunamis de la UNESCO. El tsunami resultante impactó en la pequeña población de Nuugaatsiaq, en el fiordo de Karrat.

La publicación más antigua que hemos encontrado del vídeo viral es del 8 de septiembre de 2017, en YouTube, dos meses después de aquel tsunami. Este vídeo sale citado como evidencia de los hechos en un artículo científico de la revista Natural Hazards and Earth System Sciences (NHESS).

Los deepfakes con IA, también presentes

Como ocurre con otras desinformaciones y casos de estafas, el terremoto de Kamchatka también ha dado pie a vídeos hechos con inteligencia artificial, conocidos como deepfakes. Circulan por diferentes redes vídeos con decenas de miles de visualizaciones que muestran poblaciones costeras amenazadas por una gran ola proveniente del mar, mucho más grande que los edificios de la playa. Se trata de vídeos FALSOS que magnifican el impacto real del tsunami.

En un primer vídeo, encontramos indicios sospechosos de que estamos ante un deepfake, como es la dimensión de la ola. Se ven edificios muy pequeños, además de un movimiento poco natural del agua que está más cerca del suelo. También se observa que, ante la inmensa ola que se aproxima al pueblo costero, las personas que hay en la playa no se mueven, como sería previsible si corrieran para salvar sus vidas.

En un segundo vídeo, la ola no es tan grande como la anterior, pero, según lo que encontramos en agencias de noticias como Reuters, el tsunami provocado por el terremoto de Kamchatka no ha superado los 5 metros. Además, tanto la imagen anterior como ésta muestran cómo rompen unas olas de gran magnitud, pero son científicamente poco creíbles. Como explica una publicación del National Geographic, las olas de los tsunamis son muy diferentes de las habituales porque no rompen, sino que se asemejan más a «muros» de agua que avanzan sin romperse y entran en tierra, como si fueran inundaciones repentinas. Las olas comunes de la costa suelen tener una amplitud pequeña, comparado con las decenas de kilómetros que pueden tener los tsunamis en mar abierto. Los tsunamis reducen la velocidad cuando se acercan a la costa y se encuentran con profundidades menores en el mar, lo que provoca que el muro de agua coja más altura, que puede exceder los 30 metros.

También se puede observar en el vídeo una marca de agua en el lado inferior derecho del vídeo, que corresponde con el logo de OpenAI, la empresa que ha desarrollado el servicio de IA ChatGPT. Mediante una búsqueda inversa de imágenes, hemos encontrado un vídeo corto en YouTube publicado el 8 de mayo de este año que es el mismo que el que ha circulado ahora, y que en la descripción indica: «This video was created using AI-generated visuals» («Este vídeo se ha creado utilizando imágenes generadas por IA», en inglés).

Sobre las técnicas que podemos usar para comprobar la veracidad de un vídeo, Verificat no ha encontrado hasta ahora herramientas tecnológicas 100% fiables que resuelvan de manera solvente si un vídeo está hecho o no con IA. Por lo tanto, es mejor buscar errores, exageraciones o contextos erróneos que no cuadren con la realidad y que demuestren que un contenido es falso. Es cierto que ha habido un tsunami por el terremoto de Rusia, pero la magnitud de este no ha sido tan devastadora. Las primeras imágenes de la afectación han llegado desde la costa rusa, con zonas costeras inundadas próximas al epicentro del movimiento telúrico, y también de algunas olas registradas en Japón y Hawái (Estados Unidos), según ha informado la agencia Reuters. Las olas en la costa de Kamchatka han sido de un máximo de 5 metros, añade Reuters, mientras que en Japón no han superado los 2 metros.