Cataluña ha frenado la instalación de molinos eólicos, pero no se ha puesto solo uno en 10 años como dice Illa

En la última década, han empezado a funcionar 84 aerogeneradores de nueve parques eólicos: 79 entraron en funcionamiento en 2012, tres en 2013, uno en 2014 y uno en 2018


Foto | RTVE Catalunya

¿Qué se ha dicho?

Salvador Illa afirmó que en Cataluña se ha construido “un único molino de viento” en diez años.

¿Qué sabemos?

Es cierto que desde 2013 el número de aerogeneradores de energía eólica que se han puesto en funcionamiento en Cataluña ha descendido de manera considerable, pero si miramos las cifras de los últimos “diez años”, han empezado a funcionar 84 aerogeneradores de nueve parques eólicos (79 en 2012, tres en 2013, uno en 2014 y uno en 2018).

El primer secretario del PSC y Jefe de la Oposición en el Parlament de Catalunya, Salvador Illa, aseguró en una entrevista en RTVE Catalunya que en Cataluña se ha construido “un único molino de viento” en diez años (en el minuto 54:54).

Es una VERDAD A MEDIAS. Es cierto que desde 2013 el número de aerogeneradores de energía eólica que se han puesto en funcionamiento en Cataluña ha descendido de manera considerable respecto a los años anteriores debido a un cambio en la normativa. Sin embargo, si miramos las cifras de los últimos “diez años” que menciona Illa, entre el 11 de marzo de 2012 y el 11 de marzo de 2022 (el día de la entrevista), han empezado a funcionar 84 aerogeneradores de nueve parques eólicos, según los datos facilitados a Verificat por la Associació Eòlica de Catalunya (EolicCat). De los 84 molinos, 79 empezaron a funcionar en 2012, tres en 2013, uno en 2014 y uno en 2018.

“Llevamos diez años, un único molino de viento”

Salvador Illa, PSC

Cinco aerogeneradores entre 2013 y 2022

El ritmo de puesta en marcha de parques eólicos en Cataluña ha sido mínimo en los últimos nueve años. Desde 2013, han empezado a funcionar cinco aerogeneradores de tres parques eólicos con una potencia total de 13.150 kilovatios (kw):

  • Tres en Serra de Vilobí II (9.000 kW) en marzo de 2013.
  • Uno en Sant Antoni (1.800 kW) en junio de 2014.
  • Uno en Viure de l’Aire del Cel (2.350 kW) en marzo de 2018.

Anteriormente, entre el 11 de marzo de 2012 y el 31 de diciembre del 2012 empezaron a operar 79 aerogeneradores de seis parques eólicos con un total de 191.000 kW de potencia. El 9 de marzo habían entrado en funcionamiento 29 molinos más.

De hecho, 2012 fue el segundo año en el que más aerogeneradores comenzaron a producir, con un total de 108 molinos nuevos, solo por detrás de 2010, cuando se pusieron en marcha 165 aerogeneradores.

Estas cifras son las que ha facilitado a Verificat la Associació Eòlica de Catalunya (EolicCat), la patronal del sector empresarial eólico de Cataluña. El gerente de EolicCat, Jaume Morron, explica a Verificat que la base de datos es propia de la asociación y la van actualizando a medida que hay nuevos parques eólicos. La fecha de entrada en servicio es la oficial que consta en el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.

Morron señala que el último parque eólico (con más de una máquina) fue el de Serra de Vilobí II, en Tarrés, con tres molinos de 3 megavatios (MW) cada uno. Entre este último parque y hoy, se han puesto en marcha dos molinos más:

  • Uno de 1,8 MW (Sant Antoni): se construyó junto con los demás del parque eólico Sant Antonio, que se puso en servicio el 9 de marzo de 2012. Sin embargo, hubo un molino que entró en funcionamiento con posterioridad.
  • Uno de 2,35 MW (Viure de l’Aire del Cel): es propiedad de un colectivo de ciudadanos y empresas locales y se trata de “el único que hay en Cataluña con estas condiciones”, apunta Jaume Morron.

Nos hemos puesto en contacto con el departamento de prensa del PSC para saber a qué se refería Salvador Illa en sus declaraciones, pero en el momento de publicar este artículo no habíamos obtenido respuesta.

13,2 MW más en los últimos 9 años

El gabinete de prensa del Departament d’Acció Climàtica, Alimentació i Agenda Rural del Govern ha facilitado a Verificat los datos de la potencia eólica instalada en Cataluña año a año desde 2009. La consejería no dispone de un registro sistemático de todos los parques eólicos y la fecha de su entrada en servicio.

En 2012, la potencia eólica instalada aumentó 263,3 MW, un crecimiento del 20,9%. Desde entonces, se ha ampliado 13,2 MW en nueve años. Como veíamos antes, el último incremento se dio en 2018, tras la puesta en marcha del aerogenerador de Viure de l’Aire del Cel.

En 2020, Cataluña fue una de las ocho comunidades autónomas que no instalaron ningún MW de energía eólica, según los datos de la Asociación Empresarial Eólica. El territorio que instaló más fue Aragón, que puso en marcha 1.051 MW. En total, la potencia eólica en Cataluña representó en 2020 el 4,6% del mercado, situándose en sexta posición, por detrás de Castilla y León, Castilla-La Mancha, Galicia, Andalucía y Aragón.

2012: el fin de las primas

Jaume Morron relata a Verificat que en 2012 “se suprimieron las primas a las energías renovables” y que, como “la tecnología que había en aquel momento no permitía que los proyectos fueran rentables”, se redujo drásticamente el número de parques eólicos que se impulsaban. “La retirada de las primas hizo inviable los casos de negocio”, añade el experto.

Se trata del Real Decreto-ley 1/2012, de 27 de enero, que incluía en su artículo 3 la “supresión de los incentivos económicos para las nuevas instalaciones” (de ello informó El País). Más tarde, el Real Decreto-ley 2/2013, de 1 de febrero, modificó a la baja el sistema para retribuir las instalaciones que mantenían las primas, suprimiéndolas en las instalaciones más antiguas y reduciéndolas para las restantes.

Un estudio de la Escola Universitària d’Enginyeria Tècnica Industrial de Barcelona de diciembre de 2012 concluía que “la constante revisión de primas a la baja” había frenado “drásticamente la implantación de tecnologías renovables”.

Sin embargo, sostiene Morron, ahora las palas son más largas y más aerodinámicas y las torres son más altas, cosa que ha hecho prosperar más proyectos, muchos de ellos que están en tramitación y todavía no han entrado en funcionamiento.